Tal vez uno de los momentos más decisivos en la vida de un negocio sea la expansión. Tras años de mucho trabajo, la idea funciona. Y no solo eso. Los clientes valoran el producto o el servicio que se les ofrece y en el ámbito nacional las tiendas funcionan razonablemente bien. Ha llegado el momento de mirar más allá de las fronteras españolas.
Llegada esta fase, es fácil que en la mente de muchos surja la duda de por dónde empezar. Al fin y al cabo, abrir franquicia lejos de España entraña dificultades. La primera: ¿dónde hacerlo? El mundo es muy grande, y no todos los productos funcionan igual en todas partes. ¿Mercado europeo o saltamos el charco? ¿Nos ponemos ambiciosos y pensamos en Asia y Estados Unidos o vamos pasito a pasito?
Francia, menos barreras legales para la expansión
Aunque hay tantas respuestas posibles como negocios potenciales, desde L’Express Franchise hemos contactado con Virginie Sablé, responsable de desarrollo comercial del sector franquicia de la firma de asesoría y análisis de mercado CSA, para plantearle una posibilidad muy común: la de la empresa española que, aprovechando la cercanía, quiere abrir franquicia en Francia.
“Abrir una franquicia en Francia puede ser una oportunidad para una empresa española por varias razones estratégicas y económicas. Como ambos países pertenecen a la Unión Europea, hay menos barreras legales y regulatorias para la expansión. La proximidad geográfica y la atractividad del mercado francés (poder adquisitivo interesante) presentan también una ventaja. Además, España es un destino muy popular entre los franceses para las vacaciones, así que muchos conocen ya marcas españolas”, comienza explicando la experta.
Aunque existen diferencias, añade, los consumidores franceses y españoles comparten gustos en sectores como la moda, la gastronomía y el ocio. “Lanzarse en Francia puede ser también un trampolín para seguir su desarrollo a países francófonos”, comenta.
El proceso de abrir franquicia en Francia
Tomada la decisión, relata Sable, es clave empezar por un estudio de mercado para identificar el potencial de desarrollo. “Aunque hay sinergias con España, hay diferencias en los hábitos de consumo. Se pueden contactar empresas de estudios como el Instituto CSA para evaluar la demanda del producto o servicio en Francia”.
Esto sirve por ejemplo para definir quiénes son los consumidores clave, saber dónde viven y cómo viven y para evaluar el tamaño del mercado y su potencial de crecimiento y así montar una verdadera estrategia. “Comprender el comportamiento del consumidor clave facilita el desarrollo de estrategias de marketing más efectivas y personalizadas. En nuestro departamento de Geoestrategia, CSA Géostratégie (geomarketing aumentado), determinamos las zonas con mayor potencial, medimos la presión de la competencia para estructurar un plan de desarrollo realista”.
Una vez analizado el potencial del mercado en Francia, explica Sablé, es importante definir el modelo de expansión, es decir, si se recurre a la máster franquicia o a la joint venture con un candidato franquiciado para compartir los riesgos o si se implanta una sucursal con una organización de expansión propia en Francia. “Los errores que más se ven son franquicias extranjeras que se lanzan solamente por oportunidad sin tener una verdadera estrategia”, advierte la especialista.
Trazado el plan, es clave considerar los factores legales y regulatorios como son el documento de información precontractual, Loi Doubin, cuyo objetivo principal es regular las relaciones entre franquiciante y franquiciado, el registro de la marca, los costes laborales y fiscales y la inversión inicial.
En este momento, Sablé recomienda crear un punto de venta piloto para adaptar su concepto. “Es también una adaptación a la cultura empresarial francesa que permitirá entender mejor a los futuros franquiciados y acompañarlos de manera más adecuada”.
Y algo muy importante: el contrato de franquicia español traducido en francés no será suficiente. “El uso de un contrato español traducido no le permitirá escaparse de las leyes francesas. Es clave contar con asesoramiento legal y financiero para garantizar el éxito, pero no es todo, hay que anticipar también los temas de marketing y comunicación”.
Al hilo de esto último, factores como la cultura local, el nivel socioeconómico y las tendencias de consumo influyen en la manera en que los clientes perciben y responden a los mensajes de una marca. “En CSA Géostratégie, apoyamos a las marcas a elegir los medios de comunicación que pueden ser más efectivos”, ahonda Sablé.
Ayudas y últimos casos de éxito
Pero estos retos no hay por qué afrontarlos en soledad. De hecho, existen diversas ayudas y programas para empresas que quieren expandirse a Francia. Estas ayudas pueden provenir de organismos públicos españoles, fondos europeos y entidades francesas. Dado que dependen del tipo de empresa, del proyecto, del sector de actividad, de la localización del proyecto en Francia (porque cada zona en Francia tiene programas específicos de apoyo a la inversión de manera general), es importante estar acompañado por especialistas del tema.
Así, igual que en España existe la Asociación española de la franquicia, donde los franquiciadores socios comparten sus desafíos, en Francia se puede entrar en contacto con la Fédération Française de la Franchise y sus expertos. “Las Federaciones no están para ayudas financieras, pero permiten familiarizarse con el entorno de la franquicia local, formarse y compartir con otros franquiciadores y esto es también muy importante”, aclara Sablé, que recuerda finalmente que la franquicia española de decoración y artículos para el hogar Muy Mucho se ha desarrollado en Francia estos últimos años y que marcas como Mango y Naturhouse ya llevan años instaladas al otro lado de los Pirineos. No faltan referentes.
Nuestro resumen en 5 puntos clave por L’Express Franchise IA
(verificado por nuestro equipo editorial)
Aquí tienes un resumen en cinco puntos clave del artículo sobre el tema: ¿Cómo abrir una franquicia en Francia?
1. Oportunidades en la expansión hacia Francia: Abrir una franquicia en Francia presenta ventajas significativas para las empresas españolas, como menores barreras legales y regulatorias debido a la pertenencia a la Unión Europea, así como una proximidad geográfica y un mercado atractivo con un buen poder adquisitivo.
2. Estudio de mercado fundamental: Antes de iniciar la expansión, es crucial realizar un estudio de mercado para analizar el potencial de desarrollo, identificar a los consumidores clave y comprender sus hábitos, lo que ayudará a definir estrategias de marketing efectivas.
3. Modelos de expansión a considerar: Las empresas deben elegir un modelo de expansión adecuado, como la máster franquicia, la joint venture o establecer una sucursal. Es esencial tener una estrategia clara para evitar lanzarse sin planificación adecuada.
4. Cumplimiento legal y adaptación al mercado: Es indispensable cumplir con las normativas legales en Francia, incluyendo la documentación necesaria y contar con asesoramiento legal. También es importante adaptar el concepto a la cultura empresarial francesa y crear un punto de venta piloto.
5. Apoyo y recursos disponibles: Existen ayudas y programas para empresas que desean expandirse a Francia, provenientes de organismos públicos y entidades francesas. Las asociaciones de franquicias en ambos países pueden brindar apoyo, formación y compartir experiencias útiles para facilitar la entrada al mercado francés.