Crear una empresa y desarrollar un negocio utilizando la reputación de una marca o nombre comercial es una ventaja para los empresarios. Esta estrategia financiera y de marketing se sella con la firma de un contrato de franquicia, cuyo objetivo es crear una nueva asociación para revitalizar tu negocio en un sector de actividad específico. Sobre todo, convertirse en franquiciado requiere un mínimo de experiencia en la gestión de una empresa.
¿Qué significa convertirse en franquiciado?
Ser franquiciado significa tener derecho a utilizar el nombre comercial de una marca reconocida, al tiempo que te beneficias de su saber hacer, sus competencias y sus métodos de producción.
Esto da a los empresarios la oportunidad de revitalizar su negocio afiliándose a una marca establecida.
Esto les da derecho a comercializar los servicios y productos del franquiciador.
Ser franquiciado también significa poder beneficiarse de los contratos de los proveedores y prestadores de servicios existentes.
Esto garantiza unas tarifas competitivas para las operaciones comerciales.
Sin olvidar que ser franquiciado significa sobre todo tener la garantía técnica de un franquiciador reconocido por su nombre comercial. El franquiciador, que ya ha demostrado su valía y ha obtenido beneficios, está en condiciones de ayudar a un empresario que desee convertirse en franquiciado y desarrollar el negocio a nivel regional o internacional. Ambos se benefician de las ventajas comerciales del otro.
¿Por qué franquiciar?
Los empresarios que desean convertirse en franquiciados se benefician del nombre comercial, las conexiones y los conocimientos del franquiciador. Incluso más que explotar la marca, convertirse en socio oficial y representar localmente al franquiciador garantiza una actividad comercial y económica dinámica, ya que es posible aprovechar la reputación y notoriedad de la marca. Ser franquiciado atrae a una clientela fiel, que te reportará beneficios inmediatos.
También es una forma de hacer crecer tu negocio, poniendo en marcha un plan de negocio que fomente el relevo de una marca fuerte.
Además de tener acceso a métodos operativos y experiencia, ser franquiciado también significa poder aprovechar el apoyo comercial continuo del franquiciador.
Todo lo que ponga en marcha la empresa matriz se aplicará a las franquicias, desde estrategias de comunicación y marketing hasta reestructuraciones organizativas o cambios de nombre comercial.
Ser franquiciado también te hará más resistente a las crisis económicas.
¿Cómo encuentro una franquicia?
Para convertirte en franquiciado y unirte oficialmente a una red de franquicia, tienes que seleccionar la red.
Un estudio de mercado puede orientarte.
La investigación debe centrarse en una serie de criterios, como la reputación de la marca, su fiabilidad en la zona de destino, el estado actual de la competencia, las perspectivas de desarrollo económico, la naturaleza del concepto, la visión de la empresa matriz y el volumen de negocio.
Si quieres elegir una marca y convertirte en franquiciado, tienes que buscar un sector empresarial atractivo con fuertes perspectivas de crecimiento.
Para encontrar al socio adecuado, puedes recurrir a especialistas que ponen en contacto a franquiciadores y futuros franquiciados. Acudir a ferias, mirar anuncios de franquicias y utilizar tus contactos puede ayudarte a unirte a una multinacional conocida y convertirte en franquiciado. Algunos sectores son incluso más dinámicos que otros.
¿Cuáles son los criterios para convertirse en franquiciado?
Para convertirse en franquiciado, el empresario deberá respetar las condiciones y cumplir las medidas establecidas por el titular del nombre comercial. Las obligaciones incluyen el cumplimiento de los procedimientos y métodos operativos establecidos por la empresa matriz. También existe la obligación de mantenerse al corriente de las novedades y de aceptar las condiciones del acuerdo, que van desde el suministro hasta la adquisición. No se pueden introducir cambios en el concepto inicial. Para convertirse en franquiciado, el franquiciado tendrá que pagar un canon de entrada, así como royalties por el uso del nombre comercial, entre otras cosas.
Es esencial destacar entre la competencia, porque para convertirte en franquiciado, primero debes presentar tu solicitud a la empresa.
Se analizará el perfil humano.
Esto incluye la motivación, la experiencia en el sector y la capacidad de gestión.
Contar con una aportación económica y fondos propios para la gestión del negocio también garantiza la inclusión en el panel de selección para aspirar a ser franquiciado.
La adaptabilidad también será un factor clave, ya que es esencial poder adherirse a las normas, requisitos, exigencias y reglas del franquiciador.
Los diferentes tipos de contrato de franquicia
Aunque ser franquiciado incluye un apoyo a medida, a veces significa menos independencia.
Sin embargo, los franquiciados están protegidos por la ley Doubin, que adopta la forma del DIP (Document d’Informations Précontractuelles).
Este documento proporciona todos los detalles sobre cómo se utilizará el nombre comercial y lo que implica.
Actuando como un precontrato, contiene :
- Perspectivas del mercado
- Historia
- Miembros de la red
- Estados financieros de los dos últimos años
- Cláusulas de no competencia y confidencialidad
- La duración del contrato y las condiciones de transmisión de la empresa o de rescisión del mismo
El contrato también cubre diversos parámetros, como la producción, el servicio o la distribución.
Tanto si quieres adquirir experiencia en la fabricación de productos, la distribución de servicios personales o el funcionamiento de un punto de venta, convertirte en franquiciado te ayudará a desarrollar un negocio con perspectivas reales de futuro.
