De una pequeña pizzería en Michigan a una red de más de 400 locales en España, Domino’s Pizza se ha convertido en un caso de éxito en el modelo de franquicia de pizzería. En este artículo repasamos su historia, sus claves de expansión y lo que se necesita para abrir una tienda propia bajo esta marca líder en el sector de la restauración organizada.
Los orígenes de las franquicias de Domino’s Pizza
Lo que hoy es una de las mayores cadenas de comida rápida del mundo empezó en 1960 en Ypsilanti, Michigan, cuando los hermanos Monaghan compraron una pequeña pizzería local por apenas 900 dólares. El negocio se llamaba Domi-Nick’s y, sin saberlo, aquel negocio era el inicio de una ruta de la restauración que se extendería por decenas de países en todo el mundo.
Poco después, Tom Monaghan se quedó al frente del negocio en solitario, tras cambiar la parte de su hermano por un coche. En 1965, renombró el establecimiento como Domino’s Pizza, y diseñó el logotipo que aún identifica a la marca: tres puntos en una ficha de dominó, uno por cada tienda abierta en aquel momento.
Décadas más tarde, Domino’s se ha consolidado como la cadena líder en reparto de pizzas a domicilio, con más de 20.000 establecimientos repartidos por más de 90 países.
¿Cuándo llegó Domino’s Pizza a España?
La marca aterrizó en España en 2009 de la mano del Grupo Zena como máster franquiciado. Cinco años después, la multinacional mexicana Alsea, especializada en la gestión de grandes cadenas de restauración, adquirió Zena e impulsó una fuerte expansión de la enseña en el mercado español.
¿Cuántas franquicias tiene Domino’s Pizza en España?
Hoy, Domino’s Pizza suma más de 400 locales repartidos por toda la geografía nacional y un equipo de más de 8.500 personas en toda España con un modelo mixto, que une tiendas propias y franquiciados.
Este recorrido convierte a Domino’s en un caso de análisis sobre el modelo de franquicia del sector de la restauración organizada y su expansión en España suma atractivo entre quienes apuestan por sumarse a su red de tiendas.
¿Cuánto cuesta abrir una franquicia de Domino’s Pizza en España?
Abrir una franquicia de Domino’s Pizza puede requerir de una inversión considerable, a partir de 350.000 euros, incluyendo obra civil, equipamiento y licencias. Según la información publicada por Alsea, el grupo que gestiona la marca en España, el canon de entrada para abrir una franquicia de la marca es de 25.000 euros, y el contrato tiene una duración inicial de 10 años. Es importante tener en cuenta que un primer 50% de la cantidad correspondiente al canon se aporta el día que se realice la reserva o firma del contrato y la segunda mitad quince días antes de la apertura del restaurante.
Una vez en marcha, el franquiciado debe abonar un 6% de sus ventas en concepto de royalties y un 4% adicional destinado al fondo de marketing de la marca, es decir, un 10% total vinculado al uso de marca y publicidad.
Para nuevos y futuros franquiciados también será necesario tener en cuenta los plazos habituales de retorno de la inversión. Eduardo José Gorró, asesor de Domino’s Pizza España, estima que el plazo medio se sitúa en torno a los cinco años, aunque variará en función de la ubicación, la gestión del local y la evolución del mercado.
¿Qué requisitos debe cumplir el local de la franquicia de Domino’s Pizza?
Por otro lado, el local debe tener entre 120 y 180 m2, contar con salida de humos y un diseño que permita una buena operativa, además de ubicarse en zonas con buena visibilidad comercial, como los centros urbanos. La enseña prioriza localizaciones de al menos 20.000 habitantes.
¿Qué tipo de franquiciado busca Domino’s?
No se exige experiencia previa en restauración, pero sí se valora que el perfil del franquiciado combine espíritu emprendedor, compromiso, capacidad de gestión, así como implicación directa en el negocio y los resultados. Además, es importante la gestión del talento. Como resume Gorró: “La principal característica que debe tener un franquiciado es saber gestionar personas.”
Además, desde el equipo de expansión recuerdan que abrir una franquicia exige implicación y realismo. “El principal error a tener en cuenta al empezar es pensar que poner una franquicia es fácil y que lo tienen todo controlado”, advierte Gorró.
¿Cómo abrir una franquicia de Domino’s Pizza? Los ingredientes
Abrir una franquicia de Domino’s Pizza no se resume en firmar un contrato y esperar a que lleguen los pedidos. Como una buena pizza, requiere una receta clara, ingredientes bien elegidos y un buen horneado. Este es el proceso paso a paso o, mejor dicho, ingrediente a ingrediente:
- La masa, el contacto inicial: todo comienza con una base, es decir, mostrar tu interés. Domino’s invita a los futuros franquiciados a escribir directamente a su equipo por email, incluyendo la zona de interés para abrir el local. A partir de ahí, si el perfil encaja, se concierta una primera entrevista.
- La salsa, el análisis del proyecto: como la salsa que da sabor a la base, esta fase define la viabilidad del negocio. El equipo de franquicias estudia el mercado local, la zona propuesta y los recursos disponibles. Se analiza el modelo más adecuado y se ajustan tiempos, condiciones y plan de negocio.
- El queso, la firma y el acuerdo: con la base aprobada, llega el ingrediente que lo une todo: la firma del contrato. Aquí se formaliza el acuerdo entre franquiciado y marca, incluyendo el canon de entrada, el compromiso con los royalties sobre ventas y el porcentaje destinado a marketing, así como las condiciones del contrato.
- Los toppings o la adecuación y formación: cada local es distinto, y aquí entra la personalización. El departamento inmobiliario de Domino’s asesora en la búsqueda y negociación del local. Una vez definido el espacio, arranca la adecuación con el apoyo del equipo de obra, mientras se imparte formación tanto en locales escuela como en el propio establecimiento.
- El horneado, la puesta en marcha: con todo listo, toca encender los hornos. El equipo de operaciones asigna un asesor específico para acompañar al franquiciado antes, durante y después de la apertura. El área de marketing lanza un plan de comunicación y campaña local para que el barrio sepa que hay un nuevo Domino’s cerca. El equipo de calidad y compras asegura que el producto cumpla con los estándares.
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Tras la apertura llegará el delivery o entrega del producto final. En este caso, se mantiene la revisión constante por parte de la compañía, que mantiene un sistema de seguimiento con áreas dedicadas a operaciones, recursos humanos, formación, compras y expansión, con el objetivo de que la franquicia se mantenga rentable y alineada con los estándares de la marca. En esta fase, el seguimiento es clave. “Lo principal es el apoyo integral que brindamos para que todo fluya lo mejor posible. Hay un asesor permanentemente en contacto con el franquiciado”, detalla Gorró.
Una red global con resultados en crecimiento
Mientras Domino’s sigue ampliando su red de franquicias en España, sus resultados financieros reflejan la dimensión de un modelo que combina escala global y presencia local. En 2024, la compañía matriz registró un beneficio neto de 557,3 millones de euros, un 12,5% más que el año anterior.
En España, donde la marca opera desde hace más de 15 años, el crecimiento se apoya en la apertura de nuevas tiendas y en un número creciente de emprendedores que apuestan por este modelo de franquicia dentro del sector de la restauración organizada.
Nuestro resumen en
5 puntos claves
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(verificado por nuestra redacción)
Aquí tienes un resumen en cinco puntos clave del artículo sobre el tema: “La receta para abrir un Domino’s Pizza en España: inversión, requisitos y pasos clave”.
Orígenes y expansión global
Domino’s nació en EE. UU. en 1960 y hoy tiene más de 20.000 tiendas en 90 países, incluida España desde 2009.
Modelo de negocio en España
Con más de 400 locales, Domino’s combina tiendas propias y franquiciadas bajo la gestión del grupo de restauración Alsea.
Inversión necesaria
La inversión inicial ronda los 350.000 €, con un canon de entrada de 25.000 € y royalties del 10% sobre ventas.
Perfil del franquiciado
No se requiere experiencia previa, pero sí compromiso, gestión de equipos y participación activa.
Proceso paso a paso
Desde el contacto inicial hasta la apertura, la marca ofrece formación, asesoramiento y seguimiento continuo.
