¿Por qué abrir una lavandería?

Waarom een wasserette openen?

¿Es rentable abrir una lavandería? ¿Cuál es el presupuesto necesario? ¿En qué redes de franquicia debo invertir? Te contamos todo lo que necesitas saber antes de abrir una franquicia de lavanderías.


Las lavanderías autoservicio siguen siendo un éxito, y el mercado sigue evolucionando. En la actualidad, la mayoría de los hogares disponen de lavadora, pero sigue habiendo una demanda considerable de una, sobre todo por parte de muchos franceses que no disponen de suficiente espacio vital. Para otros, este servicio ahorra tiempo y dinero, ya que permite lavar y secar un mayor volumen de ropa a un coste relativamente bajo.

La rentabilidad de una lavandería depende casi totalmente de su ubicación, pero también del número de máquinas disponibles, de la estacionalidad y de los precios aplicados. Por tanto, el local debe estar bien situado y ser visible, en una zona con un número suficiente de residentes. Además, el establecimiento debe estar a una distancia mínima de 800 metros de otra lavandería.

Dependiendo de la ubicación y del número de lavadoras y secadoras disponibles, las ventas pueden alcanzar rápidamente los 35.000 euros en el primer año (basándose en una media de 20 a 25 ciclos de lavado al día a 4 euros por lavado). Al cabo de 5 años, esta actividad y las ventas pueden duplicarse.

Abrir una lavandería autoservicio es un negocio rentable y fácil de montar. No se requiere formación específica, y las instalaciones pueden gestionarse fácilmente a distancia. La inversión inicial al crear la empresa oscila entre 50.000 y 100.000 euros, dependiendo del precio del equipamiento, el número de máquinas, los servicios ofrecidos y el alquiler.

También es una actividad que requiere muy poca mano de obra: una persona puede bastar para cuidar las instalaciones y mantener las máquinas. Algunas lavanderías autoservicio también ofrecen servicios adicionales según las necesidades (planchado, arreglos, entrega de paquetes, etc.), que se suman a las ventas del establecimiento.

En el sector del autoservicio de lavandería y limpieza en seco, existe un concepto llave en mano similar al de una franquicia, pero sin sus desventajas. Muchos actores del sector promueven su concepto “sin franquicia”.

Este modelo no exige ni derechos de autor ni tasas, lo que reduce considerablemente la inversión inicial y, por tanto, la contribución personal necesaria. Sin embargo, el propietario del proyecto se beneficia de la reputación de la marca, así como de un apoyo personalizado para ayudarle a elaborar su plan de negocio y encontrar su zona de influencia. El mantenimiento de las máquinas también lo facilita el socio, que ofrece las piezas y el equipo necesarios para las reparaciones.

Muchas cadenas de lavanderías ofrecen este tipo de asistencia “sin franquicia”.

Crea un Wash’N Dry

Wash’N Dry es un concepto de lavandería “sin franquicia” que destaca por su modernidad y agradable ambiente. Ofrece lavadoras de última generación y zonas de descanso para los clientes. El coste de la inversión inicial para abrir una lavandería Wash’N Dry puede variar, pero suele oscilar entre 80.000 y 150.000 euros, sin canon de entrada.

La marca Wash’N Dry ofrece formación completa sobre la gestión de una lavandería, la atención al cliente y un estudio de mercado para determinar la rentabilidad de la zona de captación. También proporciona a los empresarios herramientas de marketing para ayudarles a promocionar su negocio.

Comprar una Speed Queen

Speed Queen es una de las marcas de lavanderías más conocidas y extendidas en Francia. Ofrece una gama de lavadoras y secadoras de alta calidad, famosas por su durabilidad y eficacia. El coste de la inversión inicial para abrir una lavandería Speed Queen suele oscilar entre 150.000 y 300.000 euros, también sin canon de entrada.

La marca ofrece formación completa para empresarios, que abarca la gestión de la lavandería, el mantenimiento de los equipos y el marketing.

Muy en boga en Bélgica, Holanda y Alemania, el concepto de bar-lavadero, o café-laverie, es uno de los nuevos negocios que funcionan, y se ha ido introduciendo en el mercado francés en los últimos diez años gracias a la iniciativa de algunos empresarios aislados del oeste y el norte del país. La idea es transformar las tareas domésticas en un momento de relajación e interacción social.

En Francia, este concepto todavía no se ha desarrollado como franquicia, a diferencia de Bélgica, donde la red Wasbar, por ejemplo, es muy popular. Permite a los clientes almorzar o tomar un café en un ambiente acogedor, mientras esperan a que termine su ciclo de lavado. Una red que un día podría cruzar la frontera con Francia.

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