¿Por qué es interesante convertirse en multifranquiciado?

Por qué es interesante convertirse en multifranquiciado

El modelo de franquicia sabemos de sobra que es una opción interesante para personas que quieren emprender bajo el paraguas de una marca reconocida. Sin embargo, pasar de ser franquiciado único a multifranquiciado abre la puerta a nuevas oportunidades de crecimiento y rentabilidad.


En este artículo te contamos qué significa gestionar varias franquicias, por qué puede ser interesante hacerlo y cómo afrontar los retos que conlleva.

Un multifranquiciado gestiona más de una unidad, tienda o punto de venta de la misma marca, en lugar de uno solo. Lo habitual es que un emprendedor comience por ser franquiciado único y después se convierta en multifranquiciado. Es precisamente como ha sido la trayectoria de Alberto García, que comenzó como franquiciado único de Kids&Us en Talavera de la Reina (Toledo), pasó a ser multifranquiciado y recientemente ha vuelto a operar bajo un modelo de franquicia única dentro de la misma marca.

Su rol como multifranquiciado fue el de asumir la posición de CEO dentro de la estructura empresarial, lo que implica responsabilizarse de las siguientes funciones:

  • Definir los objetivos estratégicos de las unidades en coherencia con los valores y metas de la marca.
  • Una vez establecidos, delegar responsabilidades específicas a cada área o unidad y asegurarse de que todos trabajan bajo una visión común.
  • Transmitir al equipo los valores, la misión y la visión de la marca y proporcionar las herramientas necesarias para alcanzar los propósitos colectivos. 
  • Supervisar indicadores clave de rendimiento, tanto operativos como financieros, para identificar áreas de mejora y garantizar que las franquicias operen de manera rentable.
  • Mantener una comunicación constante con la franquicia matriz y el entorno de la marca. Esto incluye trabajar en conjunto para asegurar la alineación con sus directrices, solicitar herramientas o formaciones específicas y contribuir al desarrollo de la marca con propuestas de mejora basadas en la experiencia directa en el campo.
  • Formación y desarrollo del equipo para que todos los miembros reciban la capacitación adecuada y cuenten con las herramientas necesarias para desempeñar su trabajo con excelencia.

Por supuesto, el apoyo del franquiciador es imprescindible para gestionar varias unidades. Alberto García señala que deben « ofrecer programas formativos en temas como liderazgo estratégico, gestión financiera avanzada y optimización de recursos », porque permiten al multifranquiciado « asumir un rol más directivo y menos operativo ». Además, la relación franquiciador-multifranquiciado debe trabajarse y fortalecerse constantemente. 

 « Las marcas deben considerar los tiempos y perfiles de sus franquiciados y atender a las necesidades específicas de los mismos. Un multifranquiciado representa un gran valor para la marca, ya que demuestra su confianza al reinvertir y expandir su compromiso; por ello, las marcas deben ofrecer formación empresarial, mentorías y software adaptado que facilite la gestión », explica Alberto García. 

« También es esencial garantizar un retorno adecuado en términos de servicios y consideraciones estratégicas, dado el nivel de inversión y compromiso adicional que aportan los multifranquiciados », añade.

Podemos pensar que gestionar varias franquicias, en lugar de una sola, conlleva una responsabilidad mayor y también supone un reto. Alberto García opina que « el mayor reto es garantizar que las estructuras superiores realmente añadan valor a las operaciones diarias ». 

Además, explica que el secreto para lograrlo es « conocer en profundidad el sector, el negocio y la marca, manteniendo la esencia y los principios que han guiado su éxito inicial ». Estos son otros retos que destaca:

  • Mantener la coherencia en la experiencia del cliente y en la operación diaria de todas las unidades.
  • Organizar la estructura en torno a roles claramente definidos, delegando tareas y responsabilidades, lo que permite que el líder se enfoque en la visión global y no en las operaciones concretas de cada unidad.
  • Adaptarse a la variedad de mercados locales. A pesar de operar bajo una misma marca, cada unidad se va a enfrentar a realidades sociodemográficas específicas en función de su ubicación. Y aquí entran en juego las diferencias culturales, las preferencias de los clientes, las costumbres, el tejido de Partner y la competencia local. 
  • Establecer métricas claras para evaluar el desempeño financiero de cada unidad y el impacto de las operaciones conjuntas.

En el lado opuesto, una de las grandes ventajas del modelo de multifranquicia es que permite escalar el negocio aprovechando las sinergias entre las distintas unidades. Esto es precisamente lo que acaba generando incidencias directas en la cuenta de resultados. 

« Gestionar una multrifranquicia es adentrarse en la escalabilidad del negocio que ostentas. Cuando tienes una sola unidad todo se concentra y se ciñe a la operativa y a la estrategia para esa unidad con sus propias necesidades y su propio rumbo. Permite tener unidades conjuntas para administración, dirección de venta, marketing conjunto, compras conjuntas… Sinérgicamente, los equipos operativos se ven beneficiados de las experiencias puestas en común e incluso dependiendo de la actividad permite completar plantillas o generar planes de contingencia conjuntos », explica Alberto García.

Si estás pensando en convertirte en multifranquiciado y te preguntas si este modelo es para ti, Alberto García afirma que es imprescindible tener tres habilidades principales: « Delegar, liderar y abstraerse de la operativa diaria para adoptar una perspectiva más estratégica ».

Su experiencia en Kids&Us le lleva a afirmar que « el verdadero desafío radica en aprender a delegar y actuar bajo un enfoque empresarial ». Esto implica un mayor desarrollo de ciertas soft skills y, como decíamos antes, la formación correcta por parte del franquiciador para adoptar un rol más directivo que operativo. También es necesario desarrollar el pensamiento estratégico, comunicar de forma efectiva, ser resiliente, tener capacidad para adaptarse a los cambios y trabajar en la comprensión financiera. 

« Mi principal consejo para quien considere convertirse en multifranquiciado es que, antes de dar el paso, se tome el tiempo necesario para replantear y rediseñar su plan de negocio. Gestionar una sola unidad y gestionar varias son realidades muy diferentes, y no se puede asumir que lo que funciona en una escala pequeña será igual de efectivo a gran escala », recomienda.

Además, estos son otros consejos que, según Alberto García, has de tener en cuenta si planeas convertirte en multifranquiciado:

  • Volver a analizar la estructura de costos y asegurarte de que el modelo financiero sea sostenible. Esto pasa por evaluar aspectos como los recursos humanos, las inversiones en infraestructura y los posibles beneficios de la escalabilidad. También hacer un nuevo análisis DAFO y trabajar estrategias CAME que se adapten al nuevo contexto.
  • Planificar cómo será la estructura social y financiera en esta nueva etapa. Replantear aspectos legales y contractuales, evaluar si se requiere una sociedad de capital, una estructura de grupo o múltiples sociedades para gestionar las unidades.
  • No subestimar la importancia del acompañamiento de la franquicia matriz. Antes de comprometerse el futuro multifranquiciado, debería asegurarse que la marca ofrece las herramientas, garantías, entorno y apoyo necesarios para redoblar la confianza puesta en ella y adentrarse a gestionar varios puntos de venta.
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