El llamado IVA franquiciado debía de haber comenzado a aplicarse en España a partir de enero de 2025, de acuerdo con una directiva europea, pero Hacienda todavía no lo ha aprobado en España. Aun así este nuevo sistema fiscal está generando todo tipo de preguntas entre los trabajadores por cuenta propia. Esta medida ya está presente en otros países de la Unión Europea y pronto podría aterrizar en el ecosistema fiscal español con la promesa de simplificar la vida a miles de pequeños contribuyentes.
¿Pero de qué se trata exactamente? ¿Implica que algunos autónomos dejarán de declarar el IVA? ¿O es solo una forma encubierta de aumentar el control fiscal?
¿Qué es el IVA franquiciado? ¿Cómo funciona?
El IVA franquiciado está creado específicamente para aliviar la carga fiscal de los autónomos y pequeños empresarios con facturaciones reducidas. Este modelo ya funciona con éxito en países como Francia, Italia o Alemania, y permite a ciertos profesionales quedar exentos de declarar, recaudar y liquidar el IVA, siempre que no superen un límite anual de facturación.
Aunque el autónomo no repercuta el IVA en sus facturas, tampoco podrá deducirse el IVA soportado. Es decir, se simplifica el proceso tributario, pero se renuncia a ciertas ventajas. En esencia, podemos decir que el IVA franquiciado busca hacer más fácil la gestión fiscal de quienes tienen una actividad económica modesta, sin eliminar completamente su conexión con la Agencia Tributaria.
Se trata de una transposición de la Directiva 2020/285 del Consejo Europeo, que permite a los Estados miembros aplicar este tipo de exención a autónomos y microempresas. Así, el IVA franquiciadose presenta como una apuesta por la armonización fiscal europea, pero adaptada al tejido económico local.
Aunque no es obligatorio, quienes se acojan voluntariamente deberán comunicarlo a la Agencia Tributaria y cumplir con ciertos requisitos.
¿Cuáles son los requisitos para acogerse al IVA franquiciado?
El IVA franquiciado no es un régimen universal. No todos los autónomos pueden acogerse a él. Y mucho menos, de forma automática. Para poder beneficiarse de esta exención fiscal es imprescindible cumplir una serie de requisitos claramente establecidos por la Administración. Vamos a repasarlos con detalle.
- Límite de facturación. Solo podrán optar al régimen del IVA franquiciado aquellos autónomos o pequeñas empresas que no superen los 85.000 euros anuales de ingresos por actividades económicas sujetas a IVA. Si un profesional supera ese límite, queda automáticamente excluido del régimen al año siguiente.
- No estar inscrito en regímenes especiales de IVA incompatibles. Por ejemplo, quienes tributen en módulos o en el régimen especial de agricultura, ganadería y pesca no pueden optar por el IVA franquiciado. Lo mismo ocurre con los autónomos que vendan bienes o servicios sujetos a tipos especiales de IVA (como tabaco, alcohol, hidrocarburos…).
Además, la adhesión al régimen es voluntaria, pero requiere una declaración expresa ante Hacienda. Esto debe hacerse al inicio de la actividad o dentro del plazo de modificación censal habitual (normalmente, en diciembre del año anterior al que se quiera aplicar).
¿Qué ocurre en el sistema de franquicias?
¿Y los autónomos que trabajan dentro de una franquicia? Si bien muchas franquicias superan el límite de facturación por su estructura de negocio, hay casos —como franquiciados en zonas rurales o con modelos simplificados— donde puede ser una herramienta muy útil. Así, el IVA franquiciado para autónomos abre una oportunidad para quienes deseen reducir cargas administrativas, siempre que se ajusten al perfil que la normativa contempla.
Hay que entender bien el contexto fiscal, conocer los límites y declarar correctamente la voluntad de adherirse. Porque acogerse al IVA franquiciado sin cumplir las condiciones puede derivar en sanciones o en la obligación de regularizar la situación con carácter retroactivo.
¿Cuáles son los objetivos del nuevo IVA franquiciado?
El objetivo más inmediato es claro: reducir la carga administrativa de los autónomos y pequeños empresarios. Durante años, los trámites fiscales han sido una fuente constante de estrés, pérdida de tiempo y, en muchos casos, de errores involuntarios. Esta medida, si se gestiona correctamente, aligera el papeleo y mejora la eficiencia del sistema tributario.
En paralelo, otro objetivo clave es la lucha contra el fraude fiscal. Al eliminar la obligación de liquidar el IVA en ciertos casos, también se minimiza el riesgo de prácticas fraudulentas relacionadas con la deducción indebida de cuotas o la facturación falsa. Se trata de una simplificación, sí, pero también de una herramienta de control.
Por otro lado, esta política tiene una aplicación limitada y controlada. No se trata de un IVA cero para todos, sino de un régimen restringido a quienes cumplen con los requisitos, evitando que empresas grandes se beneficien de una medida pensada para el pequeño contribuyente.
En el mundo del IVA franquiciado, esto también abre oportunidades para ciertos modelos de negocio más pequeños o locales, que podrían optimizar su estructura financiera acogidos a este régimen.
¿Cómo afecta el IVA franquiciado a los autónomos de España en 2025?
El nuevo régimen de IVA franquiciado para autónomos, por el momento, no ha entrado en vigor en 2025, por lo que no afecta a ningún pagador de impuestos en España.
Aún así, cuando se aplique (no hay ninguna fecha prevista) para los autónomos las ventajas son claras: menos papeleo, menos declaraciones y más tiempo para centrarse en su negocio. No tienen que presentar el modelo 303, ni ingresar el IVA cobrado, ni preocuparse por ajustes trimestrales.
Pero también hay una cara B. Al no declarar el IVA, tampoco pueden deducir el IVA soportado en sus compras y gastos. Esto puede ser una desventaja si tienen costes fijos altos o inversiones importantes. Además, deben indicar en todas sus facturas que están exentos por el régimen de franquicia y seguir manteniendo la contabilidad, aunque de forma más simplificada.
Nuestro resumen en 5 puntos clave por L’Express Franchise IA
(verificado por nuestra redacción)
Aquí tienes un resumen en cinco puntos clave del artículo sobre el tema: IVA franquiciado 2025: ¿qué es y cómo afecta a los autónomos?
Concepto del IVA franquiciado: El IVA franquiciado es un nuevo régimen fiscal que busca simplificar la carga tributaria para autónomos y pequeñas empresas con ingresos anuales inferiores a 85.000 euros. Este sistema, que ya opera en varios países de la UE, permitirá a estos contribuyentes no declarar ni recaudar IVA, aunque también implica renunciar a la deducción del IVA soportado.
Requisitos para acogerse al IVA franquiciado: Para beneficiarse del régimen, los autónomos deben cumplir ciertas condiciones, como no superar el límite de facturación y no estar inscritos en regímenes especiales de IVA incompatibles. La adhesión es voluntaria, pero requiere una comunicación expresa a la Agencia Tributaria.
Impacto en franquicias: Aunque muchas franquicias superan el límite de facturación, aquellas en zonas rurales o con modelos simplificados pueden beneficiarse del IVA franquiciado. Esto representa una oportunidad para reducir cargas administrativas, siempre cumpliendo con los requisitos establecidos.
Objetivos del nuevo régimen: La implementación del IVA franquiciado tiene como objetivo principal reducir la burocracia y el estrés administrativo para los autónomos, así como combatir el fraude fiscal al simplificar los procesos y minimizar las oportunidades de prácticas ilegales.
Ventajas y desventajas del IVA franquiciado: Mientras que este nuevo régimen promete menos papeleo y más tiempo para centrarse en el negocio, también conlleva desventajas, como la imposibilidad de deducir el IVA de compras y gastos, lo que puede afectar a aquellos con costos fijos altos. Aún no se ha confirmado la fecha de entrada en vigor de este régimen en España.